Si a Leo le respetan las lesiones y llegan los títulos al Barça, el 2009 debe consagrarle a nivel mundial
Leo Messi mereció el premio que finalmente se llevó Cristiano Ronaldo
N
o hay quien pueda con la maquinaria oficialista de la FIFA. Anoche, en
el incomparable marco de la Opera de Zúrich, se demostró una vez más
que los estamentos futbolísticos están rendidos a los pies del
marketing y todo aquello que pueda aportar jugosos beneficios. El FIFA
World Player, otorgado por Pelé, recayó en la persona de Cristiano
Ronaldo. El luso, y el inmenso glamour que le rodea, pasaron por encima
del enorme clamor popular que soñaba con una pequeña revolución en la
que el fútbol, por obra y gracia de Leo Messi, fuera el gran vencedor
del prestigioso trofeo. Pero no fue así. El oficialismo y el peso de
los jerarcas futbolísticos no dejan márgenes a dudas. Todo está atado y
bien atado. El dinero manda y los sponsors no perdonan despistes.
Cristiano Ronaldo, un excelente jugador, aunque lejos del rendimiento
de Messi, estuvo avalado por un total de 935 votos. Muy lejos quedaron
Messi (678), Fernando Torres (203), Kaká (183) y Xavi (155).
Es
evidente que los capitanes y seleccionadores de los 155 países con
derecho a voto no quieren problemas con Blatter y el poder que le
rodea. Ajenos a la voz de la calle, los engranajes se ajustaron a la
perfección y el jugador del Manchester United vio recompensados los
títulos logrados con su club. Un gran botín recogido en el primer
semestre de la temporada. El fracaso en el Eurocopa y una desafortunada
lesión posterior ensombrecieron el resto de la temporada. Pero eso poco
ha importado en un FIFA World Player que presume de distinguir al mejor
jugador del 2008 y que reconoce cerrar sus votaciones en el mes de
septiembre. ¿Y el resto del año no cuenta? Una incongruencia que sirve
para explicar la injusticia de anoche. Y es que la propia votación
popular recogida en la web oficial de la FIFA constataba su votación:
Messi ganaba con el 48% de los votos, seguido de Cristiano Ronaldo
(35%), Kaká (8%), Fernando Torres (4%) y Xavi (2%).
El fútbol
está en deuda con Messi. En el 2007 Kaká le arrebató el galardón. Ahora
le ha tocado el turno a Cristiano Ronaldo. Pero el 2009 no puede
ignorar al que sin duda está considerado en estos momentos mejor
jugador del mundo. El crack despierta admiración allá donde pisa y el
Barça se ha convertido en el mejor trampolín para dar el salto popular
en los cinco continentes. Si las lesiones y los títulos le respetan, el
2009 está llamado a ser el año del reinado indiscutible del astro
argentino.
No pudo ser. Messi y Xavi regresaron de vacío. El
argentino, por segundo año consecutivo, se conformó con el segundo
puesto mientras veía cómo el portugués tomaba el relevo de Kaká en la
nominación del FIFA World Player. En el caso de Xavi, el considerado
mejor jugador en la Eurocopa cerró el repóker de estrellas. El juego
del Barça y la revalorización de sus múltiples estrellas sí se vieron
reflejados en la votación global. De entre los diez primeros jugadores
en el ranking figuran cuatro jugadores de la actual plantilla: Messi,
Xavi, Eto’o e Iniesta.