Es un planteamiento arriesgo. Un detalle muy poco usual en el manual de
trabajo de Guardiola, pero a día de hoy está sobre su mesa. El
compromiso ante el Villarreal es complicado, la situación física de
varios jugadores es delicada y existen demasiadas bajas de peso como
para no tirar de todos los efectivos disponibles. Ahí entra en juego
Leo Messi. El argentino ya ha notificado su plan de viaje para regresar
a Barcelona. El crack cogerá un vuelo el día 1 de enero y tiene
previsto aterrizar en El Prat el día 2, a primera hora.
Si todo
transcurre con normalidad, Guardiola espera a Messi en el entrenamiento
previo al encuentro frente al Villarreal. El técnico desea mantener una
larga charla con el argentino para calibrar su estado físico y valorar
la predisposición a entrar en la convocatoria del primer partido del
2010. Pep da por descontado que Leo se mostrará más que ilusionado por
estar presente frente a los de Valverde.
Descontadas estas
premisas, la gran cuestión es saber hasta dónde está dispuesto a forzar
la máquina el entrenador azulgrana. Existe un precedente muy reciente
que contribuye a generar más dudas. Y es que tras la disputa del último
amistoso en Kuwait, y con sólo unas horas de descanso, fueron hasta
seis los jugadores que se alinearon en el once inicial de Catalunya
frente a Argentina. Jugaron y no pasó absolutamente nada. El panorama
no es idéntico y la constitución física de Leo Messi no invita a
excesivas alegrías, aunque el Villarreal aprieta y la clasificación
liguera tampoco está para muchas concesiones.
Los técnicos se
plantean una opción intermedia en la que sólo se asumirían riesgos en
el caso que fuera estrictamente necesario. En principio, siempre y
cuando el viaje no pasara factura física, Leo entrenaría, descansaría y
quedaría citado junto al resto de jugadores convocados a última hora. A
continuación, Messi, inicialmente, quedaría relegado en el banquillo a
la espera de acontecimientos. Si todo va bien, descanso y a pensar en
la Copa. Si surgen problemas, a jugar y ejercer de revulsivo.