Luego de quedar eliminado de la Copa del Rey el pasado miércoles contra
Sevilla, Barcelona le dio una verdadera paliza futbolística al mismo
rival en el Camp Nou: lo venció por 4-0, tomó más ventaja en la cima de
la Liga española y se consagró campeón de invierno con cinco puntos de
ventaja sobre su escolta, Real Madrid.
El actor principal en la goleada del conjunto blaugrana fue nuevamente
el Lionel Messi, quien anotó los dos últimos tantos del
partido (ST 40m y 45m), llegó a su grito 101 con esa camiseta y, con 22
años y seis meses de edad, se transformó en el jugador más joven de la
historia del club en superar la centena.
El delantero rosarino ya forma parte de los 16 jugadores que han
logrado convertir 100 o más tantos en partidos oficiales en Barcelona.
El máximo goleador histórico sigue siendo César, autor de un total de
235 -su gol número cien lo anotó con 28 años y tres meses-, seguido de
Kubala (196) y el brasileño Rivaldo (130).
El Balón de Oro de 2009 es el máximo artillero de la temporada en el equipo blaugrana
con 14 goles en Liga, uno en Copa del Rey, dos en Champions League, dos
en la Supercopa de España y dos en el Mundial de clubes. Los otros dos
tantos frente a Sevilla fueron de Escudé (ST 4m), en contra, y Pedro
(ST 25m), tras un pase extraordinario de Xavi.