Argentina, un país que vive por y para el fútbol, deberá afrontar dos
partidos vitales ante Perú y Uruguay con el ineludible objetivo de
lograr una plaza para el Mundial de Sudáfrica. La albiceleste, que ha
levantado todas las dudas posibles en los últimos meses, habrá de
superar una enorme presión y Diego Armando Maradona tiene muy claro que
para ello tendrá que rendirse ante Leo Messi.
El caos que reina
en la selección es tal que ha impedido brillar al mejor jugador del
planeta, un Messi que maravilla a todos semana tras semana en el Barça
para diluirse en una Argentina que no juega absolutamente a nada. Pero
esta vez es diferente. Maradona sabe que Leo es su tabla de salvación y
por fin le dará los galones tal y como le reclamaban todas las esferas
del balompié argentino. Por su parte, el rosarino atraviesa uno de sus
momentos más dulces y está más motivado que nunca para teñir de magia
las críticas.
En la sesión preparatoria de ayer llevada a cabo
en los terrenos de Ezeiza, Maradona realizó sus primeros ensayos serios
y la verdad es que sorprendió probando en el equipo teóricamente
titular a los veteranos Martín Palermo y Pablo Aimar como escuderos de
Messi en punta.
El ‘tanque’ Palermo llega avalado por sus dos
goles en el reciente amistoso de la albiceleste contra Ghana (2-0) y
por el golazo de cabeza desde unos 40 metros que anotó el pasado fin de
semana con Boca Juniors frente a Vélez Sarsfield (3-2).
Mientras,
Aimar vive su segunda juventud en el Benfica tras varios años marcados
por las lesiones y por un rendimiento muy discreto. Además, de cara al
choque ante la defenestrada Perú, el seleccionador argentino se plantea
incluir a Carlos Tévez o al madridista Gonzalo Higuaín (la unánime
petición popular) para completar un cuarteto ofensivo que le obligaría
a alinear tan sólo tres defensas.
Ayer, Maradona dispuso un
equipo con Mariano Andújar balo palos, el recuperado Martín Demichelis,
Nicolás Otamendi, Jonás Gutiérrez, Mario Bolatti, Juan Sebastián Verón,
Rodrigo Braña, Pablo Aimar, Martín Palermo y Lionel Messi, mientras que
Angel Di María hizo de líbero en el equipo titular y en el suplente.
Sea como fuere, Leo Messi centrará todas las miradas.