La queja de la Fifpro (Sindicato Internacional de Futbolistas
Profesionales) a la FIFA y la Comisión Europea sobre el contrato de Leo Messi cone
l Barça no tiene sentido. La relación contractual del crack argentino y
la entidad barcelonista se rige por las leyes españolas que permiten
establecer un acuerdo de tiempo de duración sin límite pero que debe
ser fijado en una fecha y permite la cláusula de rescisión de contrato
con la cantidad que estimen club y jugador. La denuncia de Philippe Piat,
dirigente de la Fifpro, que sólo busca publicidad, no tiene sentido
alguno, entre otras cosas porque debería ser el propio jugador, en el
caso de no estar de acuerdo con su contrato, quien lo rescindiera y
presentara denuncia, que no es el caso.
La metedura de pata
del tal Piat es enorme porque, tal como precisó a MD, Juan de Dios
Crespo, uno de los mayores expertos del mundo a nivel de derecho
deportivo, demuestra un gran desconocimiento del acuerdo que su propio
sindicato firmó con la FIFA con el beneplácito de la propia Comisión
Europea. Crespo precisó que el límite de cinco años es para aquellos
países que carecen de una legislación propia, porque se da el caso de
que en Argentina, Brasil o España, la legislación es totalmente
diferente.
El Barça dará a lo largo d ela jornada de hoy una
nota referente al caso, tras discutirlo con sus abogados. Raül
Sanllehí, responsable del fútbol barcelonista. Confirmó a MD, que
"estamos totalmente tranquilos porque siempre hacemos las cosas de
acuerdo a la legislación vigente". Un portavoz de la FIFA, también
mostró su sorpresa por la nota de la Fifpro, comentando que parece como
siel propio Piat no se hubiera leído el acuerdo que su sindicato firmó
con la FIFA sobre los contratos de los futbolistas y su duración.
Dentro del propio sindicato de la Fifpro han existido voces contrarias
al "número" que amontado Piat porque se puede girar en su contra, tras
el primer momento de publicidad de que han disfrutado al meter por
medio el nombre de Leo Messi, que, por otro lado, se está jugando con
Argentina, la clasificación para la fase final de la Copa del Mundo de
Sudáfrica 2010.