No es una cuestión de
superstición, pero a tenor del resultado obtenido la temporada pasada,
mejor no cambiar nada. Leo Messi decidió adelantar una semana su vuelta
al trabajo junto con el resto de sus compañeros para poder completar
toda la pretemporada.
El año pasado, por primera vez desde su subida al primer equipo
-anteriormente el Mundial y la Copa Confederaciones se lo impidieron-,
Leo pudo poner su cuerpo a punto desde el primer día con el grupo. El
rendimiento fue inmejorable ya que el '10' acabó como máximo goleador
del Barça con 38 goles: 23 en Liga, 9 en la Champions -donde fue
Pichichi- y 6 en la Copa y, consecuentemente, decisivo para la
conquista del triplete.
Su liderazgo dentro del equipo es indiscutible y pese a que
Guardiola no es amante de las distinciones en el grupo, al número uno
del mundo hay que cuidarlo como tal. No es una cuestión de darle un
trato de favor, sino simplemente de mimar su cuerpo al máximo para que
continúe ofreciendo al Barça su mejor rendimiento. Un buen ejemplo de
ello quedó patente ayer tras la primera sesión de trabajo en el 'stage'
de Marlow. Juanjo Brau, fisioterapeuta azulgrana y hombre en la sombra
de Leo, ayudó al crack a estirar todos sus músculos mientras que el
resto lo hacía cada uno por su cuenta.
Prevenir lesiones
La carga de trabajo en la hora y media que duró la sesión matutina
fue grande, de ahí la importancia de cuidar los músculos para evitar
futuras lesiones. Tanto el 'staff' técnico como Messi tienen claro que
la forma de trabajar de la temporada pasada -con el plan de prevención
de lesiones y una estricta atención a la dieta- le ha ido muy bien al
jugador y, por tanto, no hay que alterar nada.
Un ejemplo para Guardiola
A estas alturas pero justo un año atrás, Leo Messi iniciaba el
'stage' con el Barça algo triste por la problemática que se generó
entre el club y la AFA por su cesión a la selección albiceleste
paraparticipar en los JJ. OO. de Pekín. Guardiola entró en escena y
gestionó a la perfección el asunto hasta tal punto que Messi no sólo le
ha agradecido aquel gesto siendo clave en el triplete, sino también
convirtiéndose ahora en un ejemplo para sus compañeros y la cantera.
Pep quiere esfuerzo y compromiso en sus jugadores y Messi está
cumpliendo a rajatabla sus códigos. Tras la sesión vespertina,
Guardiola escenificó que con Leo sí tiene 'feeling'. Durante más de 20
minutos el técnico y el crack charlaron en un tono amigable ante la
presencia de las cámaras y ya sin el resto de jugadores en el campo.