Feliz. Si de alguna manera se puede definir a Leo Messi (21 años) es así. Con una sonrisa permanente, piensa que este es el momento de entrar en la historia del Barça. Disfruta con el juego del equipo, está encandilado con Guardiola y no quiere pararse. Tiene más hambre.
¿Imaginaba un año así?
Veníamos de un par de años complicados y la gente esperaba una mejora.
Nosotros también esperábamos hacerlo mejor, pero tan, tan bien, creo
que ninguno de los que estamos dentro lo esperaba. Ni lo imaginábamos.
¿Les da tiempo para pensar en lo que están logrando ?
No, no podemos pararnos. Todavía tenemos algunos partidos de Liga y, sobre todo, la final de la Champions. Aún no podemos parar. Cuando termine la campaña será el momento de mirar atrás.
¿Haber jugado prácticamente toda la temporada entera es su mayor triunfo?
Sí, creo que sí, porque llevaba dos años seguidos lesionándome, estando
muchos partidos fuera del equipo, dos o tres meses sin jugar en una
temporada, algo parecido en la otra... Ahora poder jugarlo todo es lo
mejor que hay.
¿Qué cree que ha cambiado para que haya sido así?
No sé, pienso que nada. Siempre hice lo mismo. Me tocó lesionarme porque tenía que pasar.
¿No ha tenido un cuidado especial?
No, lo que hice en años anteriores lo sigo haciendo con Juanjo (Brau,
uno de los fisioterapeutas del equipo), que siempre estuvo a mi lado.
Lo que sí que ha cambiado es que este año, al contrario que otras
campañas, sí que hice una buena pretemporada.
Guardiola ha dicho varias veces este curso que lo que quiere es que sea feliz. ¿Eso que supone para usted?
Para mí, muchísimo. El míster es una persona especial, que está más
allá de lo que es el terreno de juego. El entrenador mira mucho el
aspecto humano. Es alguien muy cercano al jugador, está muy encima, es
muy detallista con los jugadores, sobre todo en los temas familiares, y
por eso aquí la gente lo quiere mucho.
¿En ese sentido Guardiola lo conquistó?
En todos los sentidos, porque para uno es algo hermoso que un
entrenador sea cercano y que se preocupe por uno. Conmigo se portó muy
bien desde el primer minuto.
Además, como entrenador, todos tenemos una confianza total en él por lo que está haciendo.
¿Cuál es su concepto de la felicidad?
Todo esto que nos está pasando. El entrenar con ganas, el estar bien,
el que el equipo durante el año ha hecho las cosas bien, con buen
juego, con buen ánimo, con buenos resultados y con títulos.
¿Oyó como el público pedía que le cambiaran en la final de Copa para protegerle?
Sí, pero la verdad es que a mí me gusta estar siempre dentro del campo,
por más que el encuentro así. Prefiero entrar que salir.
¿Entiende que el público tenga miedo de que se lesione y no pueda jugar la final de Roma?
Sí, porque la gente tenía en la mente lo que había ocurrido con Iniesta
y estaba un poco asustada. Es verdad que el partido estaba resuelto y
que había que cuidarse, pero yo prefiero cuidarme dentro de la cancha.
Guardiola dice que esos partidos son los que usted hace suyos. ¿Cómo lo sabe?
En muchas cosas no hace falta para que sepa cómo estoy pensando. En un
año me conoce casi perfectamente. Él tiene la capacidad de conocernos,
no sólo a mí, sino a todos. Por eso ha sabido llevarnos tan bien. Ha
logrado que la gente confíe en él.
¿Cómo logró ir desactivando los marcajes del Athletic, que fueron muy complicados al principio?
Nosotros sabíamos que iban a querer ganarnos de esa manera muy física,
que iban a intentar intimidarnos, pero en ningún momento fue así. Al
contrario, el equipo fue a más y demostró por qué se lo merece todo.
¿Por qué se lo merece todo?
Por el año que está haciendo este Barça, por el fútbol que está
realizando, que hace disfrutar a mucha gente, más allá de si un
aficionado es o no del Barça. Oigo hablar a todo el mundo y todos se
divierten con nosotros. Este fútbol merece, por tanto, la recompensa de
los títulos. Durante todo el año hemos sido los mejores en la Liga,
tanto en juego como en resultados.
Hace un año usted dijo a este diario que el equipo podía ganar más de
un título y no ganó ninguno. ¿Ahora es el momento de pasar a la
historia?
Tenemos que aprovechar el momento, porque no sabemos si un momento así
va a volver a pasar. Tenemos la opción de pasar a la historia de un
club tan grande como el Barça. Lo vamos a hacer. Vamos a darlo todo
para poder ganar la Champions.
¿Qué ha cambiado en el vestuario para que se hayan producido estos resultados?
Lo que ha cambiado es el entrenador, tiene mucho que ver en lo que está
sucediendo aunque él diga que los protagonistas somos nosotros.
Obviamente, la llegada de Guardiola, su trabajo, las ganas que
demuestra, lo que transmite, ha sido muy importante. Ha hecho muchas
cosas para que cambiemos, su llegada nos ha hecho triunfar.
Guardiola?
Guardiola sabe mucho, pero, lo que para mí es más importante, es que
además sabe transmitir sus conocimientos. Eso es fundamental para un
entrenador. Cuando él te dice algo, sabes que tienes que hacerle caso,
porque sabes que es verdad.
Rijkaard también fue alabado por sus éxitos, pero ¿Guardiola les ha aportado más?
Son diferentes. Rijkaard para mí fue impresionante, ganó muchas cosas,
hizo jugar fenomenal al equipo, fue el que me hizo debutar con 17 años
y el que me dio la confianza. Cada uno tiene su estilo, ni mejor ni
peor.
¿Ha visto a algún equipo jugar como este Barça?
El equipo que ganó la Liga y la Champions también hacía un juego muy
lindo, muy vistoso, pero este equipo, si gana la Champions, va a poder
decir que fue mejor. Yo la época del 'dream team' no la viví, así que
no tengo más referencias. Tengo 21 años.
¿Ni siquiera el Manchester United se acerca a este nivel?
El Manchester United es un gran equipo, tiene grandísimos jugadores, pero creo que el Barça tiene un poquito más de fútbol.
¿Qué es lo que más le gusta del equipo?
Que siempre quiere tener la pelota y que con ella queremos hacer correr
al rival. Cuando tenemos la pelota disfrutamos y vemos que el rival
está cada vez más nervioso.
Cuando habla del juego del equipo se le escapa una sonrisa. ¿Esa
sensación de placer que provoca en el seguidor es la que siente en el
campo?
Sin duda, somos los primeros que disfrutamos en el campo, los primeros
que nos divertimos. Y si además vas ganando, imagínense lo que uno
disfruta.
¿Está de acuerdo con los que dicen que este año se está viendo un Messi más completo?
Bueno, yo creo que hice lo mismo de siempre, aunque, obviamente, he
crecido en muchas cosas. Esta temporada he aprendido mucho y voy a
seguir aprendiendo cosas.
Ha metido más goles...
Sí, siempre estuve acostumbrado a hacer goles, pero tantos, no me había
pasado nunca, no lo esperaba. Es gracias al juego del equipo, los
delanteros tenemos muchas ocasiones, todos los delanteros del mundo
querrían estar aquí.
Si tuviera que quedarse con algún momento de esta Liga, ¿cuál elegiría?
Es difícil, ha habido tantos..., pero creo que la goleada al Madrid fue
especial. Aunque dijéramos que el partido no era una revancha por el
pasillo y el 4-1 de la pasada temporada, lo cierto es que teníamos la
espina de ese partido. Poder ir a Madrid, ganar, y ganar de esa manera,
va a quedar grabado para siempre. Hubiera querido que no se acabara.
¿Hablando de espinas, siente que le queda una última, la de la Champions, por no haber podido jugar en la final de París?
Sí, en esa Champions no pude disfrutar mucho, porque, al lesionarme en
octavos, no pude participar más. Esta vez he podido estar en todo,
estamos en la final, y ganarla sería algo completo.
Ahora que ya ha pasado el tiempo, ¿se enfadó mucho ese día, en París, al no poder jugar?
Sí, pero también era muy chico y pensaba en otras cosas. Pienso que fue
una tontería el que me enfadara. Ese día tenía que haber disfrutado más
de lo que disfruté, porque son momentos que uno nunca sabe si se van a
volver a repetir. Yo no salgo en la foto de París y me equivoqué. Tenía
que haber estado, porque yo también formaba parte de ese grupo.
Usted lleva mucho tiempo en Barcelona, pero ¿echa mucho de menos Argentina?
Muchísimo, sobre todo cuando me quedo solo aquí y la familia está allá. Eso es duro.
¿No haber jugado en Argentina hace que piense en retirarse en la Liga de su país?
Me gustaría terminar allí porque desde chiquito era mi sueño. Iba a las
canchas, y yo quiero vivir eso en el futuro por la gente de allá. ¿En
Newell´s? Bueno, lo que me gustaría es vivir el torneo argentino, cómo
se vive el fútbol allá, sentir eso. Me encantaría.
Añora mucho sus raíces, su familia, pero ¿qué significa para usted Barcelona, Catalunya?
Lo significa también todo, creo que he pasado más tiempo acá que en
Rosario. Para mí estar aquí es como si estuviera en mi tierra. Lo único
es que extraño cuando no está mi familia. Por lo demás, aquí lo tengo
todo.
¿Cree que se adaptaría a vivir en Argentina?
Allí se vive una vida muy diferente, aquí tengo mucha más tranquilidad, pero, a pesar de todo, para mí Argentina es Argentina.
¿Cómo se imagina de aquí a unos años?
Tomo la vida como me viene, siempre fue así, no me he parado a
pensarlo. No sabes ni lo que va a pasar el año siguiente. Hay que ir
paso a paso, sin preocuparse más, pero el otro día miraba las copitas
que ya hemos ganado y que tengo en casa y pensé que me gustaría
retirarme habiendo ganado muchas más.
En ese sentido, es su primera temporada como 10 del equipo. ¿Cómo lleva lo de ser un ídolo?
Con tranquilidad. Al principio me sorprendía que la gente me
reconociera, pero ya lo asumo con normalidad. No tengo ningún problema
en salir a la calle y en pararme a hacerme fotos.
¿Cuáles son los instantes más estelares de su vida, los que usted fotografiaría?
Quizás cuando debuté con el Barça, cuando conseguí los primeros
títulos, esta temporada... Pero me pasan tantas cosas en tan poco
tiempo que las tomo al vuelo. Nunca imaginé qué iba a llegar tan rápido
a la élite.
Florentino Pérez ha desembarcado como candidato con una frase
enigmática sobre posibles fichajes del Barça. ¿Algún día iría al
Madrid?
No lo creo. Por mí no me iría de acá nunca, aunque en el fútbol nunca
se sabe lo que puede llegar a pasar. Sin embargo, en el Madrid no me
veo, la verdad.
Con quien sí se ve es con Dani Alves. ¿Cuando aterrizó pensó que la conexión entre ustedes sería tan armónica?
Siempre me he llevado muy bien con los brasileros. Yo ya sabía que con
Alves me iba a entender muy bien. Con los grandes jugadores siempre te
entiendes y es más fácil. Desde la pretemporada se vio que estamos
unidos.
¿No le da rabia que acaba un partido y Alves está como si tuviera fuerzas para otro?
(Risas) Ahora ya no, porque está con nosotros, pero antes cuando estaba en el Sevilla sí.
¿Cómo definiría a Iniesta?
Todo lo que se diga de él es poco, es impresionante, igual que Xavi. Son calidad pura, llevan el peso y el timón del equipo.
¿Y qué diría de Eto´o?
Delanteros como él son muy difíciles de encontrar, no los hay en ningún
lado. Tiene una facilidad goleadora enorme y después está el trabajo
que hace.
¿Henry ha cambiado mucho?
Ha conseguido adaptarse mejor al juego del equipo. Ahora está feliz y
eso hace que las cosas le salgan bien dentro de la cancha.
¿Los catalanes mandan mucho en el equipo?
En este equipo nos llevamos todos muy bien. No hay envidias, todos
tiramos para el mismo lado y nadie manda más que el otro, el que manda
es Guardiola.