El tímido Lionel Messi, al que prácticamente no se vio en el partido de ida por las semifinales en Liga de Campeones  de la UEFA contra el Chelsea (0-0), volvió por sus fueros justo antes de la vuelta el miércoles, firmando un doblete con el Barça frente al Real Madrid (6-2) en un Clásico "impresionante".

"Es verdaderamente increíble, todo nos ha salido. El juego, los goles, ¡impresionante!", dijo Messi a los periodistas tras la gran actuación en Madrid de su equipo y la suya, con dos goles, un pase decisivo y un sinfín de ocasiones. "Hemos demostrado por qué debemos ser campeones", añadió Messi, concluyendo que en el Santiago Bernabéu ganó el equipo "que tiene mejor fútbol".

El delantero argentino, máximo goleador de la Liga de Campeones (ocho goles) y del Barça contando todas las competiciones (36 goles), se siente "bien para el partido contra el Chelsea" y "confiado" tras el Clásico, que prácticamente ha puesto en bandeja el título al Barça.

En una innovación del entrenador Josep Guardiola, Messi se colocó en ese partido en el centro del ataque, cambiando de puesto con Samuel Eto'o. "Sabiendo cómo jugaba el Madrid colocó a Messi en la punta y a mí entre la banda y la mediapunta. Ahí se ganó el partido", explicó Eto'o.

¿Repite en Londres?
Guardiola podría verse tentado de reintentar la experiencia en Londres contra el Chelsea, después de que los jugadores del Chelsea le tomaran bien la medida a Messi por la derecha en el Camp Nou. El entrenador de los 'Blues', el "brujo" Guus Hiddink, colocó frente a él al portugués José Bosingwa, un lateral derecho al que no le importó jugar de lateral izquierdo. Aun mejor, Bosingwa, apoyado por Florent Malouda y John Terry, estuvo muy inspirado a la hora de bloquear a Messi cuando el argentino intentaba irse hacia el centro.

A pesar de sus muchos esfuerzos, Leo Messi no logró dar con la solución en un partido decepcionante. Incluso casi desapareció en el segundo tiempo. Pep Guardiola, deseoso de proteger a un jugador de sólo 21 años, le defendió. "Estoy contento del partido que hizo Leo. Nunca es fácil para un delantero encontrar espacios, sobre todo contra jugadores muy fuertes físicamente", afirmó entonces el técnico catalán.

Messi también se defendió hablando de un partido "muy complicado, muy difícil" sobre todo debido a la táctica defensiva presentada por el Chelsea. "Hemos intentado en varias ocasiones jugar al fútbol, entrar por todos los lados, pero fue imposible marcar un tanto", añadió Messi.

"Nos queda un partido por jugar y no tengo la menor duda de que en Londres marcaremos al menos una vez". Un gol podría ser suficiente, incluso aunque el Chelsea también marque otro.