La Europa del fútbol está de
enhorabuena: llega un Barça-Chelsea, un clásico del Siglo XXI y un mano
a mano entre dos amigos, casi hermanos. Por algo Deco, cuando era el
alma del último Barça campeón de Europa, fue el maestro más apasionado
del entonces aprendiz de crack, Leo Messi. Y por algo lo primero que
soltó el portugués en cuanto el martes se confirmó que la semifinal de
la Champions League sería contra su ex equipo fue que iba a ser "muy
igualada, si no fuera porque el Barça tiene a Leo Messi".
Pero Deco es un ganador nato y el Chelsea quiere serlo al fin en
Europa, "aunque para ello habrá que estar al 100 por 100". Igual que
Messi. MD recogió el desafío que se lanzaron ambos, uno desde Múnich,
el otro desde Londres. "¡Veremos quién gana! Te deseo suerte, como
siempre, pero pasaremos nosotros", avisó entre risas Messi. "Leo, te
quiero mucho, pero esta final debe ser nuestra, ya le toca al Chelsea",
replicó Deco.
El análisis futbolístico de la semifinal tiene una clave maestra.
Deco admitió que tal y como está "no hay manera de parar a Leo, por las
cosas que hace en pocos metros y porque las hace siempre". Y advirtió
que si bien "el Barça también está en un gran momento, Messi marca la
diferencia". Además, intuye que "Leo está muy motivado y con muchas
ganas de ganar esta Champions". Tal es la admiración que siente Deco
por Leo que calificó como "un honor poder decirle a mis hijos que he
jugado con él; disfruto viéndole, es fabuloso". Y en lo humano
considera a Messi "un gran amigo, porque aparte de buen jugador, es muy
buena persona". Por todo ello consideró que "será especial volver a
Barcelona". "Jugar en el Barça fue un sueño cumplido y me encantará
reencontrarme con la afición que tanto me quiso", dijo.
Jugar y ganar la final
Messi no le fue a la zaga. "Será lindo vernos con Deco. Y también
con Belletti", dijo. El '10' del Barça admitió que "los equipos
ingleses son duros y complicados", perodio a entender que la clave
estará en el propio Barça. "Si somos nosotros, estamos fuertes e
imparables", dijo. Leo está loco por ganar esta Champions, su
Champions: "Mi sueño es estar en Roma. Esta vez quisiera poder jugar la
final y ganarla. Tengo una espina clavada porque la de París no pude
jugarla". Y el último escollo es el Chelsea. "Otra vez empezaremos en
casa, habrá que salir a resolver a la primera como ante el Bayern",
aconsejó Messi. Deco, bromista, se despidió con un deseo para su amigo:
"Lo unico que puedo pedirle es que contra nosotros no lo haga todo tan
bien... ¡Ja, ja, ja!".